Análisis – El impacto de los recortes en las transferencias sobre el Chaco

Análisis del equipo de la consultora Politikon Chaco

 

Entre los diferentes anuncios que realizó el ministro Caputo, hay uno que impacta de manera directa en los distritos subnacionales: la reducción, “al mínimo” de las transferencias discrecionales a las provincias.

¿Qué son las transferencias discrecionales? Son envíos de fondos que realiza el Estado Nacional a las provincias que, a diferencia de la coparticipación y esquemas de reparto automáticos, no están atadas a un régimen preestablecido. Los envíos automáticos, que se componen de la coparticipación, leyes especiales y compensación por Consenso Fiscal, se rigen por los guarismos establecidos por Ley: por ende, cada jurisdicción subnacional ya sabe que parte de la torta le corresponde. Los envíos discrecionales (correctamente llamados “no automáticos”) no gozan de esa característica, sino que se trata de repartos que se realizan a voluntad política del funcionario de turno, más allá de que en algunos casos se prevea los envíos para algún objetivo determinado.

Dentro de los envíos no automáticos o discrecionales, encontramos fondos de diferente naturaleza: recursos para el desarrollo de programas educativos, de salud y obra pública; recursos de Anses para financiar déficit de las cajas previsionales provinciales no transferidas; fondos para el desarrollo de parques industriales o fomentos; recursos para el Fondo Nacional de Incentivo Docente, entre otros, que suelen estar determinados en el presupuesto nacional (independientemente que después se cumpla con lo pactado en ese texto). Pero también, encontramos otros fondos que son de libre disponibilidad y que tienden a ser ayudas financieras a desequilibrios de las cajas provinciales: entre estos, están los famosos Aportes de Tesoro Nacional (ATN) como también la Asistencia a Provincias vía desembolsos no reintegrables.

Por ende, las transferencias discrecionales tienen naturalezas distintas en función de su objetivo, fin específico y razón que explica el fondeo, pero tienen a la vez una misma raíz de origen: el gobierno de turno debe aprobar y autorizar esa partida a ser enviada, no como con los recursos automáticos que se realiza, justamente, de manera automática con goteo diario realizado por el Banco Nación a cada distrito.

Entendido esto, ¿cuál es el peso de las transferencias discrecionales en las provincias? Al cierre de primer semestre del 2023, las transferencias discrecionales equivalieron al 5,5% de los ingresos totales del consolidado de las 24 jurisdicciones subnacionales; en términos del producto, equivalieron al 0,4% del PIB. En el año 2022, participaron del 6,1% de los ingresos y del 1,0% del producto.

Por supuesto que, dada las particularidades propias de los envíos discrecionales, no en todas las provincias se observa el mismo grado de participación en relación con sus ingresos. En los primeros seis meses del 2023, hay picos de participación del 12,5% de los ingresos en La Rioja y pisos del 1,3% que se observa en Neuquén.

En ese marco, en la provincia del Chaco las transferencias discrecionales durante el 2022 representaron el 6,9% de los ingresos totales que tuvo la provincia; en el parcial enero-junio de 2023, representan el 8,0%.

Estos fondos en análisis han ido variando mucho a lo largo de los años. Tomando como base los últimos años, en el 2019 participaron apenas del 4,9% de los ingresos totales en un año donde sufrieron fuertes recortes (en 2018 habían representado el 7,6%). En el año 2020, producto de la pandemia que requirió mayores niveles de transferencias por la emergencia, elevaron su participación a casi el doble que el año anterior: fue del 8,7% y volvió a subir en 2021 cuando representaron el 9,4% de los ingresos totales de la provincia. Ya en el año 2022, de la mano de un fuerte ajuste (programa FMI y ajuste de cuentas fiscales mediante), las transferencias discrecionales cayeron en su participación: pasaron a ser del 6,8% de los ingresos totales chaqueños. Finalmente, la proyección realizada por el equipo de Politikon Chaco para el período enero-junio de 2023 muestra que las transferencias no automáticas representaron el 8,0% de los ingresos, por encima del total del 2022.

En esos años, el peso de las discrecionales en el Chaco fue mayor que en el consolidado de las 24 jurisdicciones: 8,7% en Chaco vs. 8,3% consolidado provincias en 2020; 9,4% vs. 8,2% en 2021 y 6,8% vs. 6,3% en 2022.

De acuerdo con el presupuesto provincial 2024, las transferencias equivaldrían al 6,7% de los ingresos, pero ese es justamente el numero que se pone en discusión en la actualidad.

En el plano nacional se ve que el Chaco tiene uno de los mayores niveles de participación de las transferencias discrecionales entre las 24 jurisdicciones: tomando el primer semestre 2023, las provincias con mayor grado de discrecionales sobre ingresos totales fueron La Rioja (12,5%), Santiago del Estero (9,4%), Buenos Aires (8,1%), Chaco (8,0%) y Misiones (7,8%). Por el contrario, en CABA (1,9%), Chubut (1,6%) y Neuquén (1,3%) se observan los menores niveles.

Si bien los datos anteriormente expuestos corresponden, como se dijo, al primer semestre del 2023, es factible conocer con mayor detalle los envíos discrecionales al Chaco para el período enero-noviembre del 2023. En ese tiempo, el Chaco recibió un total de $ 61.381 millones por envíos discrecionales o no automáticos, que equivale a 1,1 meses promedio de coparticipación federal en el año.

Los dos puntos que concentran el mayor volumen de fondos dentro de las discrecionales corresponden a programas que, a priori, no deberían ser sujetos a recorte: para el Fondo Nacional de Incentivo Docente llegaron $ 10.352 millones y para el Financiamiento del Déficit de la Caja Previsional chaqueña otros $ 7.104 millones. En el primer caso, se trata de una ley nacional y no puede cortarse, aunque podría sufrir recortes reales ante avance inflacionario. En el segundo caso, se trata de un punto altamente conflictivo ya que la Anses suele demorar o retener total o parcialmente pagos por ese concepto e, incluso, hay provincias que al día de la fecha tienen judicializada esta situación.

En volumen, durante el 2023 el tercer punto de mayor envío de fondos fue para Desarrollo de Obras de Infraestructura Hídrica, siendo este un programa financiado por el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), por lo cual la duda es que si el gobierno nacional sostendrá esa línea de crédito o la cortará, eliminando de esta forma los envíos por dicho concepto a la provincia. Para el concepto de “Obras por Transferencia para provincias y municipios” llegaron al Chaco en los once meses del año unos $ 5.603 millones, fondos que podrían ser sujeto de recorte total. Otros $ 5.034 millones llegaron por “Gestión Educativa en el nivel primario” que surge de las transferencias de las competencias de educación a las provincias, razón por lo cual podría ser un punto a recortar pero difícilmente eliminar.

A partir de aquí entramos en quizás los puntos más susceptibles a ser recortados o directamente eliminados: siguiendo el orden de transferencias por volumen, al Chaco llegaron en el período analizado unos $ 3.295 millones por Aportes del Tesoro Nacional. Los ATN, como ya se expresaron por parte del gobierno nacional, podrían ser cortados de raíz, aunque exista aún el Fondo que lo alimenta que surge de la distribución primaria de la coparticipación. Otros $ 2.633 millones llegaron por “Asistencia Financiera para ampliación y refacción edilicia”, sujetos a eliminación. Lo mismo ocurre con los $ 2.115 millones de “Desarrollo de Infraestructura Rural en Argentina”; $ 2.078 millones de “Comedores Escolares”; $ 1.729 millones de “Proyectos Focalizados- Situación de Vulnerabilidad Social”; $ 1.391 millones de “Apoyo al Desarrollo de Obras de Saneamiento y Agua Potable – PROFESA”; $ 1.297 millones de “Ejecución de Emprendimientos de Aprovisionamiento de Agua”; $ 1.230 millones por “Emergencia Social para Catástrofes o Emergencias Climáticas”; $ 1.184 millones de “Acciones para la Mejora y Desarrollo de la Infraestructura Municipal”; $ 1.181 millones de “Prevención y Mitigación de Emergencias y Desastres Agropecuarios”; y otros $ 1.000 millones de “Asistencia a provincias”, un aporte no reembolsable que el Tesoro Nacional brinda a las provincias para libre disponibilidad.

Los puntos antes detallados son solo algunos de los que se pondrían en revisión y sería sujetos a recorte, pero existen otros 74 conceptos y/o programas (por $ 8.260 millones) por los que el Chaco recibió fondos durante este 2023 que también son sujeto a ser eliminados o ajustados.

Hasta tanto el equipo económico encabezado por Caputo no determine qué es “el mínimo” al que hizo referencia, no se podrá cuantificar de manera precisa el impacto para el Chaco durante el 2024; sin embargo, aún con eso en consideración, el ajuste sobre estos fondo será fuerte, lo que obligará al gobierno de la provincia a reajustar sus estimaciones de ingresos respecto al presupuesto aprobado y la revisión del gasto.